La salud siempre es primero
Tener presente en nuestras vidas un ritual de bienestar que mejore la salud y el bienestar del el cuerpo y el espíritu es una actividad que nunca debemos dejar de lado. Somos organismos perfectos y a su vez muy complejos, por tanto, estar saludable no es solo la ausencia de enfermedad, sino la suma de varios factores que influyen en el cuerpo, la mente y el espíritu.
Tener buena salud es la suma de muchos factores, tanto internos como ambientales, por lo que para mantener nuestro equilibrio es necesario cuidar de todos ellos, sin descuidar ninguno. Estos factores tienen el poder de influirse mutuamente, por ejemplo, cuando estás físicamente enfermo, tu estado de ánimo no es el mejor y tu alma tampoco es capaz de tomar las decisiones que mejor te convienen. Del mismo modo, la mente puede influir negativa o positivamente en el cuerpo.
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La salud que debes cuidar para estar en equilibrio
El cuerpo, del que depende tu salud física, que para muchos se considera el aspecto principal, está influenciada por los alimentos que consumes, su calidad, la forma de prepararlos y de consumirlos marcan la diferencia entre la salud y la enfermedad. Para tener un equilibrio de salud en tu cuerpo es indispensable la actividad física y el movimiento diario, pasar tiempo a la luz natural con calidad y cantidad de sueño adecuada.
La salud de tu mente, de la que depende la salud mental y emocional, que es tan importante como la salud física, puede influir positiva o negativamente en tu organismo, los pensamientos negativos, el estrés y los traumas pueden empeorar tu estado de salud, mientras que la conciencia despierta te ayuda a mantener la salud mental en equilibrio.
El alma, de la que depende la salud espiritual, es quizás el aspecto que menos se tiene en cuenta, pero que, sin embargo, es fundamental, al igual que los otros dos. Estar en contacto con el alma, seguir los sueños y las aspiraciones es una forma de crecer y evolucionar, siguiendo el propio camino de la vida.
El desarrollo personal y la autorreflexión son esenciales para encontrar el propósito de tu vida. Explorar la espiritualidad (que puede incluir o no la creencia en una religión) también mejora en gran medida tu salud.
